Selma Lagerlof: El Carretero de la Muerte

Este libro llego a mi conocimiento de una forma bastante peculiar. Conocía a su autora, Selma Lagerlof, una figura increíble dentro de la literatura y primera ganadora del premio Nobel en 1909. Sin embargo, desconocía por completo su obra, no me llamaba la atención, en general, la literatura sueca nunca me ha llamado la atención; es mas, ni siquiera soy fan del cine de Bergmann que, dentro de lo sueco, es lo que mas se conoce de puertas para fuera. Fue cuando vi un trabajo de carrera de un muchacho de talento impresionante sobre el cine de Viktor Sjostrom (el precursor del cine sueco y el prota de Fresas salvajes, del ya mentado Ingmar Bergman) que me sentí atraído tanto por el director como por la recien re-descubierta Selma. En este video-musical (porque si, es un video-musical con chorromil estilos distintos) se habla de la adaptación cinematográfica de esta novela, y me entro un prurito de curiosidad que me obligo a leerme el libro porque, sinceramente, con Nosferatu ya tuve suficiente ración de cine mudo para esta vida. 

El carretero de la muerte basa su premisa en una leyenda clásica sueca. La noche de San Silvestre, víspera del año nuevo, aquella persona que fallezca antes de las campanadas que anuncian el nuevo año debera ocupar el puesto del carretero de la muerte, una figura sombría y errante que recorre sobre su destartalada carreta cada confín del mundo acompañando a las almas al otro lado, y deberá cumplir este ciclo durante un año entero, en que sera sustituido por otro desafortunado que tenga la desdicha de morir en esa fecha concreta. 

¿No me digáis que la leyenda no es acojonante?.
Selma Lagerlof la utiliza como hilo conductor para presentarnos la historia de un pecador justificado, David Holm, que borracho como una cuba muere tras una paliza agravada por la tuberculosis. David sera recogido por Jorge, su antiguo compañero de farra, ahora convertido en Carretero de la Muerte; este le dirá cual es su nuevo destino, no sin antes actuar a remedo de fantasma dickensiano, mostrandole todo el mal que su crueldad ha sembrado en el mundo. Así comenzara un viaje entre el sueño y la realidad, con personajes desgraciados y tísicos a lo largo del camino, empañado siempre por los miasmas de la enfermedad y la muerte. 

El cartel de la película de Sjostrom, muy expresionista.

Como he dicho antes, esta novelita recuerda mucho a Canción de Navidad, pero con muchísima mas mala leche. Toda la obra avanza siguiendo las visitas que el Carretero realiza a enfermos y moribundos, todos vinculados de una u otra forma a David Holm. El carretero actúa como un guía macabro, como un Virgilio, para enseñar a David Holm el oficio que deberá desempeñar, y de paso todo el daño que ha hecho a sus semejantes, sobre todo a su familia: Jorge guía a David hacia su redención.
La novela es una joya fantástica que se lee en una tarde. Si bien es muy hija de su tiempo, algo anticuada, sobretodo  por  los personajes, su fetiche por los monólogos interiores y las obviedades, muchos dialogos cargados de dramatismo hace su desarrollo no solo sea artificiales, sino  completamente histrionicos. Ademas, he tenido la desgracia de leer la novela con una maquetacion de calidad bastante cuestionable. Aun así, si eres capaz de ver que esta novela tiene ya mas de 100 años y que no ha envejecido como Zola o Dickens (que sus tintes dramaticos también son igual de exagerados), la disfrutaras enormemente. Es mas, quizá os anime a ver la película de Sjostrom, en caso de que te guste Bergmann,  si no, ni la olais.

Os dejo aqui el video-musical de Viktor Sjostrom, y os convido a que lo veais, porque no tiene desperdicio:https://www.youtube.com/watch?v=8URuQ